CRECE LA TENSIÓN EN MEDIO ORIENTE TRAS INTERVENCIÓN DE EE.UU. EN CONFLICTO ISRAEL E IRÁN

Agencias Internacionales — La escalada del conflicto entre Israel e Irán alcanzó un nuevo punto crítico tras la intervención militar de Estados Unidos, generando una ola de reacciones internacionales y un incremento alarmante en las víctimas civiles.

El presidente estadounidense Donald Trump anunció que su país llevó a cabo bombardeos contra tres instalaciones nucleares estratégicas de Irán: Fordo, Natanz e Isfahán. Según declaraciones del secretario de Defensa, Pete Hegseth, el programa nuclear iraní ha sido “devastado” como resultado de estos ataques.

La respuesta iraní no se hizo esperar. El presidente Masud Pezeshkian condenó enérgicamente la “agresión” estadounidense y acusó a Washington de respaldar las operaciones militares israelíes en territorio iraní. En represalia, Irán lanzó 40 misiles contra Israel y advirtió sobre nuevas medidas que, según dijo, el enemigo “lamentará”.

A su vez, las Fuerzas de Defensa de Israel informaron de una nueva oleada de bombardeos sobre objetivos militares en el oeste de Irán, incluyendo plataformas de lanzamiento de misiles. El conflicto, que se ha intensificado rápidamente, ya deja un saldo humano significativo: más de 400 muertos en Irán, de acuerdo con el Ministerio de Salud de ese país, y al menos 25 fallecidos en Israel como consecuencia de ataques con misiles y drones iraníes.

Las reacciones internacionales no se han hecho esperar. China y Rusia manifestaron su rechazo a la intervención de EE.UU., mientras que el papa León XIV hizo un llamado urgente a la diplomacia para evitar una “vorágine irreparable”.

A pesar de los bombardeos, Irán mantiene reservas de uranio enriquecido, según informó un consejero del líder supremo Ali Jamenei. En un gesto desafiante, el Parlamento iraní propuso el cierre del estrecho de Ormuz, punto neurálgico del comercio mundial de petróleo y gas.

La comunidad internacional observa con preocupación el rápido deterioro de la situación, mientras aumenta el riesgo de un conflicto regional de consecuencias imprevisibles.